viernes, 2 de julio de 2010
Enredos de Amor a la Sombra del Dólar
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(Sinopsis)
Más que una narración, los enredos de amor a la sobra del dólar, retratan facetas de las vivencias del inmigrante; por un lado, el estudiante universitario comprometido con la revolución que dejando su país en medio de la guerra civil se dispone a cruzar ilegalmente hacia los Estados Unidos. El cuerpo avanza hacia al Norte, en tanto que su alma y corazón permanecen entre los suyos, rumiando por todo el camino los enredos de amor que conformaban su ser; amor por su patria, por la que estuvo dispuesto a ofrendar la vida; amor por su vida familiar y social, por la que aprendió a repudiar la injusticia; y amor por el lujurioso sexo con su novia y en las casuales relaciones libres.
Complementando al “mojado” en su ruta al sueño americano, va una sombra apostándole a conquistar el amor de su vida; la mujer que el destino parecía servirle para consolar sus frustraciones de expatriado y revolucionario en repliegue. Esa novia, que quizás sin aceptarlo, la amaba, y quien sin apoyar su causa, estaba con él, cualquiera que fuese el destino elegido.
En ambos casos encontramos la coincidencia del inmigrante semi-inserto; entre el pueblo que le vio nacer y la ruta hacia la tierra del dólar. Los Enredos de Amor a la Sombra del Dólar nos enmarañan en la picardía sexual, la cruda realidad social, política y militar de finales de los 80s, el amor y efectos en la vida de alguien que decide salir de su patria, El Salvador.
(Sinopsis)
Más que una narración, los enredos de amor a la sobra del dólar, retratan facetas de las vivencias del inmigrante; por un lado, el estudiante universitario comprometido con la revolución que dejando su país en medio de la guerra civil se dispone a cruzar ilegalmente hacia los Estados Unidos. El cuerpo avanza hacia al Norte, en tanto que su alma y corazón permanecen entre los suyos, rumiando por todo el camino los enredos de amor que conformaban su ser; amor por su patria, por la que estuvo dispuesto a ofrendar la vida; amor por su vida familiar y social, por la que aprendió a repudiar la injusticia; y amor por el lujurioso sexo con su novia y en las casuales relaciones libres.
Complementando al “mojado” en su ruta al sueño americano, va una sombra apostándole a conquistar el amor de su vida; la mujer que el destino parecía servirle para consolar sus frustraciones de expatriado y revolucionario en repliegue. Esa novia, que quizás sin aceptarlo, la amaba, y quien sin apoyar su causa, estaba con él, cualquiera que fuese el destino elegido.
En ambos casos encontramos la coincidencia del inmigrante semi-inserto; entre el pueblo que le vio nacer y la ruta hacia la tierra del dólar. Los Enredos de Amor a la Sombra del Dólar nos enmarañan en la picardía sexual, la cruda realidad social, política y militar de finales de los 80s, el amor y efectos en la vida de alguien que decide salir de su patria, El Salvador.
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1 comentario:
A propósito de Enredos de amor bajo la sombra del dólar…
Leer el reciente libro de nuestro compañero y amigo Daniel Joya, me hiso recordar los momentos vividos en las luchas de ese noble y valiente pueblo Salvadoreño, halla en aquel punto anclado en el tiempo donde a pesar de lo difícil del momento, siempre quedaba tiempo de amar y robarle a la persona escogida un sin fin de caricias mientras se inundaba cada rincón de su ser con empalagos de ternura.
Siempre quedaba tiempo de buscar la tranquilidad de un escondiste seguro, donde cobijarnos con su cálida presencia, mientras por una fracción de tiempo se olvidaba la posibilidad misma de una involuntaria partida… siempre había tiempo para amar y escuchar ese “me abrumas” mientras se inundaba con empalagos de ternura ese ser que se prestaba para una entrega con sabor a despedida...
Como dirían los pacifistas siempre valdrá la pena buscar el momento de dejar de hacer la guerra para hacer el amor.
Yo recomiendo la lectura de este libro por el estilo sencillo y la utilización de palabras tan comunes en nuestro amado pueblo y por la forma cómo se relatan los momentos vividos, mientras cual partera se asistía a la patria en ese prolongado parto de un mañana de justicia y esperanza para todos, ya no solo para los oligarcas y sus servidores, si no para todos…
En este libro se relata el dolor que se guardaron nuestros compañeros que tuvieron que abandonar esa patria chiquita y con una pausada determinación de vencer adentrarse en un camino que podía ser el último trayecto de sus vidas, como fue el caso de muchos que nunca más se supo de ellos…
“Un día en un lugar de la patria amada pondremos un monumento grande a los que partieron y no pudieron leer nunca ese hermano lejano bien venido a casa. Un día pondremos un monumento donde las madres, los hijos, los hermanos y todos los que amaron a alguien que partió y nunca más se supo de él… Puedan derramar sus lágrimas…”
Sobre la caminata rumbo al norte de seguro existen miles de historias para ser contadas y unas para quedarse guardadas convenientemente en el silencio de un profundo deseo de olvidar… Para los salvadoreños la partida al norte es una realidad tan posible como la muerte misma, yo diría que la mayoría de mi pueblo es un posible inmigrante con el agravante de ser salvadoreño…Pero nunca nadie con una cuarta de frente puede creer que lo hacen o lo harán por aventureros como lo afirmo, por ahí una vieja loca…
Los invito a leer este libro para conocer momentos que no se sabe que existían dentro de un proceso revolucionario donde la derecha recalcitrante sembraba de muertos las calles y por lo tanto se creía o se podía creer que no había espacio para el amor… Pero no existe un mejor lugar para amar que las entrañas mismas de ese pueblo que con valentía derrotaba estrategias, tal como lo hace ahora…
Al encontrar palabras escritas tal como las dice nuestro pueblo el lector reconocerá el lugar de donde una vez le vieron partir y tendrá dos cosas por hacer : Reencontrarse con esa realidad entusiasmado o ponerse hipócrita . Esta afirmación me hace recordar lo que decía el compañero Otto halla por los ochenta, una mujer de nuestro pueblo ante la posibilidad de que la deje el auto bus mientras tira de la mano de su hijo, no le dice apúrate pedazo de mi alma que nos deja la unidad móvil, sino que le grita, apúrate mono hijueputa que nos deja esta babosada…
Recomiendo la lectura de este libro por el relato de esos históricos momentos con ese estilo exquisito con sabor a mí pueblo, a mi me encanto, decidí no ponerme hipócrita, yo se que a usted le gustara…
Francisco Pereira.
Que Dios los bendiga.
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